El telescopio espacial infrarrojo Spitzer de la NASA ha obtenido nuevas imágenes de la nebulosa NGC 7000, más conocida como nebulosa de Norte América, en la que se aprecian miles de jóvenes estrellas nacidas a 1 800 años luz de la tierra.
Esta guardería estelar obtuvo su apodo de “Nebulosa de América del Norte” porque se asemeja a dicho continente cuando se visualiza en longitudes de onda de luz visible. Pero la vista cambia completamente cuando la formación se ve en longitudes de onda infrarrojas, donde opera Spitzer, y se revelan grandes nubes moleculares inmersas en el proceso de formación de estrellas.
Esta fotografía de la Nebulosa de Norte América combina las imágenes captadas en el espectro de luz visible y en infrarrojo. Gracias a las imágenes, Luisa Rebull y sus colegas centro de Ciencia Spitzer de la NASA en el Instituto de Tecnología de California han identificado más de 2.000 nuevas estrellas jóvenes.
NGC 7000 es una nebulosa grande que cubre un área equivalente a la luna llena.
