¿Por qué tenemos diferentes tipos de sangre?
Esto se debe a las mutaciones de los diferentes antígenos en el exterior de los glóbulos rojos de la sangre. Se cree que el primero de ellos se separó de los chimpancés hace 13 millones de años y fue el de tipo A. Mientras que otros son más recientes.
En la actualidad hay 30 grupos sanguíneos reconocidos y sus proporciones difieren en los distintos grupos étnicos.
En la actualidad hay 30 grupos sanguíneos reconocidos y sus proporciones difieren en los distintos grupos étnicos.
¿Los perros tienen diferentes tipos de sangre como los humanos?
Sí, y a veces nuestras mascotas necesitan de transfusiones también, así que siempre es útil saber qué tipo de sangre tiene nuestro perro.
Por ejemplo, los gatos tienen tres grupos: A, B y AB. Alrededor del 90% de gatos domésticos de Estados Unidos son de grupo sanguíneo A, los B se presenta generalmente en algunas razas puras más exóticas. El tipo AB es el tipo más raro entre los mininos.
Los tipos de sangre de los perros se indican con DEA o antígenos de eritrocitos y se dividen en ocho categorías:
DEA 1,1
DEA 1,2
DEA 3
DEA 4
DEA 5
DEA 7
DEA 8
Los perros que son DEA 1,1 pueden ser considerados como receptores universales.
Por ejemplo, los gatos tienen tres grupos: A, B y AB. Alrededor del 90% de gatos domésticos de Estados Unidos son de grupo sanguíneo A, los B se presenta generalmente en algunas razas puras más exóticas. El tipo AB es el tipo más raro entre los mininos.
Los tipos de sangre de los perros se indican con DEA o antígenos de eritrocitos y se dividen en ocho categorías:
DEA 1,1
DEA 1,2
DEA 3
DEA 4
DEA 5
DEA 7
DEA 8
Los perros que son DEA 1,1 pueden ser considerados como receptores universales.
¿Qué pasa si te transfunden sangre que no es de tu tipo?
Tu sistema inmunitario produce unas proteínas llamadas anticuerpos que actúan como protectores contra las células invasoras que entran a tu organismo. Si te transfunden sangre de otro tipo, tu sistema inmunitario fabricará anticuerpos que reaccionarán contra el tipo de sangre invasor.
Si un paciente recibe la sangre equivocada, sus anticuerpos se encargarán de destruir las células. Esta respuesta agresiva puede causar fiebre, escalofríos e incluso insuficiencias como respiratoria y renal.